400 funcionarios de Boadilla rechazan la bajada de sus salarios

Según anuncia el diario “ElConfidencial”, los sindicatos con representación en el ayuntamiento de Boadilla del Monte están preparando unas navidades calentitas, y lo que no van a ser navidades.

CCOO, UGT y CSIF, han solicitado al Tribunal Superior de Justicia de Madrid la nulidad de la sentencia que declaró ilegal una subida de sueldos que el exalcalde de la localidad, Arturo González Panero, aprobó en 2008 para todos los funcionarios, cargos de confianza y sus concejales. González Panero, alias ‘el albondiguilla’, es uno de los principales imputados en el caso Gürtel.

La sentencia, de enero de 2013, provocó todo un terremoto en el Ayuntamiento, ya que afecta a más de 400 funcionarios (incluidos los agentes de la Policía Local), y una treintena de cargos de confianza y exconcejales.

Alternativa por Boadilla (APB), el grupo municipal que denunció la subida, calcula que solo la devolución que deben hacer los cargos de confianza y los exconcejales asciende a más de 180.000 euros. La de los funcionarios, “unos 7.000 euros por cabeza”, señala el edil Ángel Galindo, portavoz de APB, con lo que la suma podría llegar a los tres millones de euros.

Según la sentencia del TSJM, el equipo municipal entonces dirigido por ‘el albondiguilla’ aprobó en mayo de 2008 una subida salarial para todos los funcionarios del 5,2%, cuando la Ley de Presupuestos Generales del Estado limitaba el incremento al 3%.

“El Ayuntamiento tenía dos meses desde que se le notificó la sentencia para ejecutarla, pero nunca lo hizo”, señala Galindo. Alternativa por Boadilla tuvo que solicitar la ejecución de la misma, procedimiento que se ha abierto en la sección de ejecuciones del TSJM.

Ahora, UGT, CCOO y CSIF han presentado en la sección sexta del TSJM un incidente excepción de nulidad. “Plantean la nulidad de la sentencia cuando el tribunal ha abierto la pieza de ejecución, justo en el momento en el que el Ayuntamiento ha sido requerido para que pida a los trabajadores la devolución del dinero”, concluye Galindo.